-Nunca te voy a lastimar, te lo prometo. –Entrelazó sus
manos con las mías-
-No, por favor. Nunca más digas eso, no lo prometas. –Le respondí
tan rápidamente con el miedo de que algo sucediera-
-¿Por qué? ¿Qué hay de malo en eso? ¿Acaso quieres que te
lastime?- Pronuncio él, con un dejo de tristeza y molestia en sus palabras-
-No, no es eso. Es simplemente la necesidad de no querer que
lo hagas. Ya que si lo prometes espero que sea así, pero nunca lo será. No
sabemos lo que nos puede pasar de aquí a un mes. Si tú me amaras de la misma
manera en la que yo te amo. Si yo voy a ser la única que te llame la atención.
Si conocerás a otra persona. Si cuando el mundo se acabe, yo te deje de amar.
No volveré a ser la misma. Porque el amor que siento por ti duele, con el constante
miedo de perderte. Y es tan difícil decirlo sin caer a tus brazos, pero, te
amo, y eso lo único que me importa ahora.
hermoso. me siento muy identificada
ResponderEliminarMuchas gracias, a todos nos ha pasado alguna vez!
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